HACER INTELIGENTE LA RED DE AGUA

sensores IoT y radiologger

SMAQ también permite implementar sistemas de monitorización de la red de agua mediante el despliegue de sensores IoT, incluyendo contadores de proceso, combinados con radiologger en puntos estratégicos de la red.
La variedad de sensores IoT permite desarrollar soluciones ad hoc con respecto a las necesidades del gestor: fugas de agua, manipulaciones, mediciones operativas y mucho más.

SENSORES IOT

Los sensores IoT son compatibles con SMAQ y se suministran junto con el radiologger; son seleccionados por APKAPPA por su robustez, rendimiento y fiabilidad.

Situados en puntos estratégicos de la red de agua, su misión es detectar determinadas magnitudes (presión, volumen y desbordamiento) que son transmitidas por el radiologger RNB10 al centro SAC de SMAQ.
Aquí, los datos se procesan para proporcionar información útil e inteligible a los operarios del gestor.

RADIOLOGGER add-on para sensores IoT

El radiologger RNB10 puede combinarse con sensores IoT y medidores de procesos preparados para la lectura remota, independientemente de su marca y alcance.

RNB10

Obtiene información del sensor y/o contador sobre la cantidad de agua que pasa (índice de lectura, caudal máximo y mínimo) a través de un accesorio contador de impulsos, suministrado con él, y otras informaciones útiles para identificar situaciones de fuga, desbordamiento, falta de recurso, así como para señalar situaciones en las que su batería está por debajo del 10% o se ha desconectado el cable que lo conecta al aparato.

Registra los datos recogidos y los transmite a la plataforma de software IOTeqa a horas fijas o bajo demanda. Se puede programar para que envíe flujos de datos varias veces al día o bajo demanda durante periodos de "campaña de detección" o a intervalos fijos al menos una vez al día.

Se autoalimenta y no necesita conexiones eléctricas.
Funciona incluso en entornos hostiles (por ejemplo, inundaciones, pozos subterráneos con refuerzos de hierro fundido y tapas de alcantarilla, al aire libre) gracias a su robustez, grado de protección (IP68) y al hecho de que se comunica a través de la red inalámbrica pública NB-IoT.

Según la preferencia del gestor, puede suministrarse con la conectividad NB-IoT incluida, evitando así que el gestor tenga que llegar a acuerdos con los proveedores de NB-IoT, o igualando el acuerdo del gestor.
Se garantiza su funcionamiento durante al menos 10 años desde su primera instalación.

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ANÁLISIS DE DATOS

Todos los datos generados por los sensores IoT se transfieren a través del radiologger a la plataforma de software IoT, llamada IoTeqa.
Aquí se registran en su formato original, se procesan para convertirlos en datos estructurados y se registran en un almacén de datos en el que se basan muchas funciones de análisis y estadísticas, predefinidas o configuradas según el tipo de actividad de supervisión que el gestor pretende llevar a cabo, para que sirvan de apoyo:

Detección de fugas de agua
Identificación de posibles manipulaciones
Redacción de balances hídricos
Decisiones sobre la distritación.